¿QUÉ SE SIENTE SER VIEJA?

Esta es una práctica de locución que hice mientras estudiaba, grabé mi voz con un celular. Espero les guste.

https://www.dropbox.com/s/09rgqnyye9dp989/Qu%C3%A9%20se%20siente%20ser%20vieja_%20definitivo%20-%20M%C3%BAsica.mp3?dl=0

EJERCICIOS DE RESPIRACIÓN DIAFRAGMÁTICA

Hay varios ejercicios que nos ayudan a aumentar la capacidad de retención del aire. Uno puede elegir el que más le guste. En mi caso, los hago todos porque me divierten. Además, los puedo variar, según el sitio donde estoy.
El primero puedo hacerlo en cualquier parte: en el bus, mientras camino en la calle o en un centro comercial.

Inicio con  cuatro o cinco respiraciones llevando el aire a la parte inferior de los pulmones. Sé que lo estoy haciendo bien, cuando -además de que parece que se me infla el estómago- mis hombros permanecen quietos. Si estos se mueven significa que estoy llevando el aire a la parte superior de los pulmones.

En la siguiente respiración, retengo el aire mientras, mentalmente, cuento hasta tres y suelto todo el aire. 

Hago otras dos respiraciones sin retención del aire y, en la siguiente, comienzo a soltar lentamente el aire en 10 pequeños soplos (esto es para aprender a dosificar la salida del aire). Al terminar, aún debo tener aire guardado en los pulmones y este lo suelto de un solo. 

Vuelvo a hacer otras dos respiraciones diafragmáticas sin retener el aire.

En la siguiente respiración, suelto el aire en 20 soplos y luego dejo ir el resto en uno solo.

Nuevamente hago dos respiraciones y sigo con 30 soplos. Ya llego a 40 y todavía me queda un poquito de aire. 

Por cierto, los primeros días que uno ejercita el diafragma, pueden doler los músculos debido a la falta de costumbre.

Otro ejercicio es pararme muy cerca de una pared, poner una hoja de papel y soplar tan fuerte que el papel no caiga. Por cierto, me llevó tiempo descubrir que el papel caía porque lo soltaba al abrir la boca, ahora espero a que el aire llegue al papel. Aunque era lo obvio, me llevó unos tres días entender qué hacía mal.

También soplo, de cerca, la llama de una candela o vela, pero con cuidado de no apagarla. Así, el aire debe salir muy despacito.

Pero el método más divertido es hacer pompas o bombas de jabón. Tras una respiración diafragmática, trato de hacer una sola burbuja de jabón usando todo el aire (claro que es una mega burbuja que hará la delicia de cualquier niño que mire. Posteriormente trato de hacer tres pompas con el aire de una misma respiración. Confieso que no siempre me sale así, porque dejo ir tan rápido el aire que salen multitud de burbujas, pero así se aprende a manejar la salida del aire.

¿Y porqué esto es tan importante para un locutor?

Por que a mayor cantidad de aire retengo, junto a la capacidad de manejar la cantidad que suelto en cada palabra, puedo leer oraciones más largas, sin que me falte el aire.

Todavía hay una clave más sobre la respiración, pero de esa te contaré en la próxima entrada. Hasta entonces

NO TENGO PANZA... RESPIRO CON EL DIAFRAGMA

En definitiva, con los nuevos hábitos alimenticios para cuidar mis cuerdas vocales, estoy más delgada, pero se me nota más la panza (estómago). Pero esto es intencional, porque ahora tengo respiración de locutora, aunque sería más correcto decir: de bebé.

A nuestra más temprana edad, todos tuvimos respiración diafragmática (llevábamos el aire a la parte baja de los pulmones donde, las costillas flotantes, permiten al diafragma extenderse hacia abajo; así, los pulmones guardan más aire dando la impresión que el estómago se infla). Pero al crecer, los adultos nos dicen: meta la panza para que se mire mejor. Claro, decían esto por ignorancia.

Esta forma de respiración es útil y necesaria no solo para locutores, cantantes y músicos de instrumentos de viento (flauta, saxofón, trompeta, y otros).

Es buena para todas las personas, en todos los momentos del día, pues nos ayuda a mantenernos relajados. Por el contrario, una respiración superficial (que hacemos cuando llevamos el aire hacia la parte superior de los pulmones), impide una correcta oxigenación del cuerpo y afecta su funcionamiento (incluidas las cuerdas vocales). Como nuestro cuerpo recibe poco aire, debe respirar más seguido, pero como nuestro cerebro recibe menos aire, nos estresamos y nuestro cuerpo se pone tenso, incluida nuestra laringe. Esto, además de influir en un mal desempeño de nuestra voz, también puede hacernos daño. 

En fin, lo que hacía de manera tan natural e instintiva siendo una bebé, ahora la desarrollo mediante una serie de ejercicios que debo hacer diariamente. Pero lo mejor es, volver esta respiración un hábito que debo usar a cada instante del día, toda mi vida.

La próxima semana les cuento algunos de los ejercicios que aprendí, en Locución 1, para re-aprender la respiración diafragmática. 

Hasta entonces.

LO QUE BEBO Y COMO, INFLUYE EN MIS CUERDAS VOCALES

Por fin llegué a la primera clase de Locución 1 y, para celebrarlo, cedí al antojo de tomarme una gaseosa. Raramente  las tomo por que engordan, pero creí que aquella ocasión, tan especial, lo merecía. 

Para colmo, la dejé, a medio tomar sobre mi mesa de trabajo.

La profesora  me preguntó: ¿qué tiene allí? Cuando le respondí que una gaseosa, me dijo: pues vaya despidiéndose de ellas. 

Yo ya sabía que deshidratan las cuerdas vocales, pero como no íbamos a grabar no lo creí importante. ¡Gran error! Aunque tengo la opción de evitarlas únicamente dos horas antes, sería como si un deportista cuidara lo que come únicamente el día que compite.

En realidad, un locutor profesional necesita mucha disciplina para mantener la salud de su cuerpo, pues, al final de cuentas, esta influye en su capacidad de trabajar con sus cuerdas vocales. 

Entre las muchas cosas que debemos evitar (por lo menos dos horas antes de un trabajo de locución), están: los lácteos y los ácidos (pues producen flema), el café, azúcar, bebidas energizantes y jugos artificiales, Lo mismo que alimentos grasosos, repostería, la mayoría de galletas, chocolates, los condimentos y las tortillas. 

Bebidas heladas (aunque sea agua) y de los helados, ni hablar.

Nuestro peor enemigo es el cigarro, pues además de provocar cáncer, también causa ronquera. Y, en la actualidad, voz ronca no es sinónimo de candidato a buen locutor; pues ya no se trata del tipo de voz, sino de la calidad en el manejo de ella, lo que nos convierte en profesionales de la locución.

También debemos alejarnos de los licores, tanto para evitar su vicio, como por el hecho de que deshidrata las cuerdas vocales.

Hay cosas con las que sí podemos darnos total libertad: El agua, las manzanas y los tés (que podemos endulzar con gotas edulcorantes). El té más recomendable es el de bambú (que podemos encontrar en las macrobióticas).

En mi caso, por fin tomé la decisión que, tanto como aprendiz o como locutora profesional, cuidaré mis cuerdas vocales con responsabilidad. Habrán alimentos como los lácteos, el tomate (que es ácido), jugos de cítricos, entre otros, que consumiré, horas antes de usar mis cuerdas vocales para trabajar, pero otros son un enemigo demasiado importante para mi salud; así que, para ser una excelente profesional de la voz, deberé evitarlos.

Otra cosa que nos dijo la maestra es que, al terminar su curso, terminaríamos delgados pero también con más panza. Pero de eso, les cuento en el próximo post. Hasta el próximo lunes, primero Dios.

MI MENSAJE DEBE SER FÁCIL DE ENTENDER PARA EL OYENTE.

Acabo de terminar la materia de Principios de la Comunicación.

Aprendimos infinidad de cosas que, desde mi percepción, las resumo así:

Como locutores y productores radiofónicos tenemos el deber de transmitirle, al oyente, un mensaje con buen contenido, que le llegue de una manera clara, motivadora amena, interesante,  y entretenida.

En manejo del idioma aprendimos el lenguaje radiofónico: palabra, música, efectos de sonido y silencio; en Cultura General, de dónde sacar temas interesantes de qué hablar y escribir; en Principios de la Comunicación, las imágenes auditivas.

Hacer esto último, es fascinante... porque es dejar, en el oyente, la sensación de "ver" los paisajes, los árboles y las personas que le describimos; que pueda"sentir" que toca las telas, cabellos y cualquier objeto que aparezca en la historia; que su nariz "huela" los perfumes, flores y frutas; que su boca "sienta" el gusto picantito de la canela o la acidez de un jugo de naranjas recién exprimidas. 

Esto parece fácil, pero no lo es... especialmente para un aprendiz. Pero, cuando lo logramos, ocurre la magia de la comunicación.

Primero Dios, en quince días, les contaré más sobre este mundo tan especial de la radiodifusión. Hasta entonces.

COMO LOCUTORA DEBO CONOCER SOBRE MUCHOS TEMAS DE INTERÉS E IMPORTANCIA

La materia de Cultura General me gustó bastante. Me di cuenta de que los locutores, al igual que los periodistas, deben ser un mar de conocimiento con una cuarta de profundidad.

Aprendí que "tener cultura" no se trata de ir a museos, conciertos y bibliotecas. Cultura es todo lo que hacemos los seres humanos, dependiendo de la época, tipo de sociedad y la clase social a la que pertenecemos.

Así que, todos tenemos una cultura, solo que algunos hemos desarrollado más ciertas áreas. Por ej: tecnología, ciencias, artes... Pero que eso, no hace menos valiosas e importantes las otras áreas que forman nuestra cultura.

También aprendí la importancia de conocer sobre la historia de la humanidad (como especie y por civilizaciones). Llevar esta materia fue genial, pues me dejó la inquietud de seguir investigando sobre estos temas tan interesantes.

Hasta la próxima entrada.

NO ES CUÁNTO HABLO, SINO QUÉ TAN BIEN LO HAGO

Hoy quiero hablarles de Manejo del Idioma:

Aprendí que, como locutora y productora de guiones radiofónicos, debo saber usar muy bien las palabras; lo mismo que las reglas de ortografía y los signos ortográficos. Espero no  cometer esos errores en el blog, pero, si lo hago, les agradecería me corrijan, pues la práctica y las correcciones me hacen crecer.

Es hermoso  plasmar en palabras nuestros pensamientos, pero hay reglas para hacerlo de forma clara, precisa; de lo contrario, nuestro mensaje será confuso para otros.

Me siento feliz de ir mejorando mi forma de escribir.
También fue maravilloso descubrir el talento de mis compañeros y de cómo, guiados por la profesora, comenzamos a pulir nuestro talento como escritores.

Poco a poco, les iré contando más de este proceso... y, de cómo nos vamos convirtiendo en locutores profesionales.